Guía rápida para entender la prohibición del matrimonio infantil en Colombia
Como lo explica Naciones Unidas, el matrimonio infantil es todo aquel en el que al menos una de las partes que contrae el vínculo es menor de edad, específicamente menor de 18 años. Dichos matrimonios son oficialmente conocidos como “Matrimonios y Uniones Infantiles Tempranos y Forzados” (MUITF).
En resumen, es una unión en la que una o ambas partes no han expresado personalmente su libre consentimiento a la unión, habiéndose informado adecuadamente. Estos matrimonios no serían libres, ya que el ser menor de edad implica directamente no tener la capacidad para tomar dicha decisión y entender las responsabilidades que implica.
¿Por qué suele darse el matrimonio infantil?
Según Girls not Brides, alianza de organizaciones dedicada a eliminar estos matrimonios, la principal causa es la desigualdad de género, que deriva en la creencia de que las niñas y mujeres son en alguna medida inferiores a los niños y hombres. Otras causas relacionadas son la pobreza, la falta de educación, las prácticas sociales de algunas comunidades y la inseguridad, situaciones recurrentes en países frágiles, como lo explica la organización Save the Children en su más reciente informe sobre la niñez mundial.
Cabe resaltar que el matrimonio infantil no únicamente se da forzando a niñas a casarse, sino también a niños, pero no es lo más recurrente. Mientras que en niñas se da en 1 de cada 5, en niños se da en 1 de cada 30. Al igual que las niñas, los niños se ven forzados a asumir responsabilidades para las que no están preparados.
Puede sonar descabellado que los padres quieran casar a sus hijos e hijas, pero para muchos parece ser la opción más viable. Para familias con escasez económica, los padres consideran que el matrimonio le puede garantizar un futuro a sus hijas, pasándole la responsabilidad de la manutención a otro.
Para las comunidades en las que la familia de la mujer paga una dote a la familia del hombre, entre más joven es la mujer, menor es el monto a pagar, por lo que les resulta conveniente e incentivante casar a las niñas a muy temprana edad. Cuando la familia del novio paga por la novia, los padres de la niña ven en ella una fuente de ingresos.
Puedes conocer más sobre la dote en: La Dote Wayúu: de la estigmatización a la comprensión de las tradiciones
El matrimonio infantil en cifras
Como lo indicó el Grupo de las Naciones Unidas para el Desarrollo Sostenible en 2023, en todo el mundo hay un aproximado de 640 millones de niñas y mujeres (vivas actualmente) que se casaron en la infancia, es decir, 12 millones de niñas al año, según la última estimación mundial incluida en el análisis.
Según el mismo informe, en América Latina y el Caribe hay 58 millones de niñas casadas, un 9% del total mundial. Sin embargo, se advierte que la región se encamina a tener el segundo nivel mundial más alto de matrimonio infantil para 2030, solo por detrás de África subsahariana, a pesar de haber disminuido en los últimos años.
En Colombia, según un reporte de UNICEF Colombia de 2010 a 2020, el país ocupa el puesto número 20 en el mundo respecto a niñas casadas o unidas antes de cumplir siquiera los 15 años. En su mayoría son niñas y adolescentes indígenas y afrodescendientes.
De acuerdo con el Censo Nacional de Población y Vivienda de 2018, en Colombia el 1,8% de las niñas entre los 10 y 14 años estaban o habían estado casadas o en unión. Mientras tanto, en el caso de adolescentes mujeres entre 15 y 19 años, corresponde con el 15%.
A su vez, en el caso de los niños de 10 a 14 años, el Censo arrojó que el 1,6% estaban o habían estado en situación de MIUT. Así mismo, el 4,8% de adolescentes hombres (15 a 19 años) declararon estar o haber estado en MIUT.
¿Cuáles son los determinantes del problema en el país?
Una de las explicaciones que otorga UNICEF, es que es un fenómeno circular. Es decir, es causa y al mismo tiempo consecuencia. Por ejemplo, la falta de educación y oportunidades empuja a niñas y adolescentes a casarse temprano. Sin embargo, el matrimonio temprano impide que continúen estudiando y desarrollen habilidades que les podrían abrir puertas en el mundo laboral, ya sea porque sus esposos no les permiten o porque deben dedicarse a la crianza de hijos.
Los factores determinantes estructurales son socioeconómicos y políticos, y los intermedios son de familia, comunidad y redes. Puedes informarte mejor en el informe completo que encontrarás en este enlace. También puedes ver las estadísticas más recientes (2022) en este link, pero para dejarlo en algo más concreto, según un informe de Profamilia, en Colombia diariamente al menos una niña o adolescente es forzada a casarse.
Esto es consecuente con las cifras de pobreza del país. Los departamentos con mayor pobreza, como Vichada, Amazonas, Chocó, La Guajira, Caquetá y algunas zonas de Antioquia, registran las cifras más altas de matrimonio infantil.
Afortunadamente, el pasado 13 de noviembre de 2024 se prohibió el matrimonio infantil y las uniones tempranas forzadas en Colombia. Se logró gracias a una iniciativa del Senado, que por ahora, resta que sea sancionada desde la Presidencia de la República. Anteriormente, el matrimonio ante la ley se permitía desde los 14 años con el consentimiento de los padres.
Puedes informarte más sobre esta ley en los canales oficiales del Senado de la República.
¿Por qué es importante prohibir el matrimonio infantil en Colombia?
La principal causa es que dicha práctica contribuye a perpetuar la pobreza y la violencia, lo que atenta directamente a la integridad y el correcto desarrollo de los menores. Según datos del DANE, cerca del 70% de los adolescentes de 15 a 19 años en MIUTF no asiste a instituciones educativas.
Acudiendo nuevamente a Profamilia, alrededor de 7 de cada 10 niñas y adolescentes en MIUTF han reportado haber sido víctimas de algún tipo de violencia dentro de su unión, mientras que el 4,1% reportó haber sido víctima de algún tipo de violencia sexual. Esto está directamente relacionado con las altas cifras de embarazo adolescente que tiene Colombia.
¿Cómo se puede actuar contra el matrimonio infantil y forzado?
Además de las medidas legislativas que se están tomando, es importante realizar un trabajo de concienciación, educar y empoderar a las niñas y adolescentes, e incluir la participación de líderes religiosos y tradicionales para poder actuar desde la raíz de muchos de los casos. Todo lo anterior implica tomar medidas como planes de acción y mecanismos de coordinación que incluyan un trabajo de pedagogía. Estas recomendaciones fueron dadas por la Asamblea General de las Naciones Unidas.
Personalmente, puedes hacer trabajo pedagógico desde tu comunidad, organizando charlas y talleres para sensibilizar, apoyar a las organizaciones o unirte a los activistas que trabajen por esta causa y usar tu voz en redes sociales.
También puedes denunciar si conoces de alguna o algún menor que esté sufriendo de algún tipo de violencia a las respectivas líneas de atención.
Línea 141: Esta es la línea gratuita nacional del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF). Está disponible las 24 horas del día, los 7 días de la semana.
Línea 123 de la Policía Nacional.
Línea Purpura: ¿Cómo llamar a la línea púrpura? Delitos contra la mujer