"En agosto nos vemos": la novela inédita de García Márquez

Tras el fallecimiento de Gabriel García Márquez el pasado jueves 16 de abril en Ciudad de México, a los 87 años de edad, surgió la pregunta obvia, impulsada por curiosos y conocedores de su obra, de si el Nobel de Literatura dejó material literario inédito, y si sí lo hizo, qué es y cuándo será publicado. 

El escritor colombiano lanzó Memoria de mis putas tristes en el año 2004, una novela que es hasta ahora su última publicación editorial conocida.

En agosto nos vemos, sin embargo, sería el título de un libro en el que García Márquez venía trabajando desde antes de 1999, época por la que leyó un fragmento del mismo en la Casa de América de Madrid, en un foro sobre "La fuerza de la creacíon iberoamericana".

Rosa Mora, periodista de El País, escribió en ese tiempo que se trataba del "primer cuento de una novela de 150 páginas que incluirá otros cuatro" y que "formaría parte de un un todo unitario protagonizado por Ana Magdalena Bach, una mujer culta y aún bella, al borde de la tercera edad, que cada año en agosto, el 16, viaja al pequeño pueblo donde está enterrada su madre".

En el primer viaje, Magdalena encontraría "una aventura amorosa que no esperaba y que cambia su vida", explica Mora en un PDF que está en internet. 

En ese se puede leer la transcripción completa del cuento que leyó García Márquez, llamado En agosto nos vemos, de donde habría salido el título tentativo de la obra completa.

Ya en 2009, Cristóbal Pera, director editorial de la casa editorial que publica los libros del escritor colombiano en México, había refutado a la agente del Nobel, Carmen Barcells, con la existencia de una versión avanzada de En agosto nos vemos. 

Barcells había dicho ese mismo año que el escritor ya no lo era más, que se había retirado, lo que García Márquez negó también varias veces.  

Foto: Agencia EFE. Cortesía del Banco de la República. 
Original de la exposición "Celebrando a Gabo".
 

Permiso de la familia para publicarla

Cristóbal Pera, director editorial de la casa editorial que publica los libros del escritor colombiano en México, confirmó hace pocos días, según el periódico español El País, que la familia de García Márquez no ha decidido si permitirá que el manuscrito de la novela sea publicado como obra póstuma.  

Al parecer, García Márquez nunca la terminó porque nunca estuvo contento con el final. “Estaba al punto de cierre, pero no la terminó por eso, por lo perfeccionista que era. Le costaba concluirla y no quería que se publicara de momento”, le dijo a El Tiempo Claudio López Lamadrid, director de la división literaria de la editorial Pengüin Random House. 

Les compartimos entonces un fragmento de uno de los cuentos que conformarían el manuscrito, que pueden leer completo aquí.

"Antes de arreglarse se quitó la camisa escocesa, el anillo de casada y el reloj de hombre
que usaba en el brazo derecho, y se hizo abluciones rápidas en la cara para lavarse el
polvo del viaje y espantar el sueño de la siesta. Cuando acabó de secarse sopesó en el
espejo sus senos redondos y altivos a pesar de sus dos partos, y ya en las vísperas de la
tercera edad. Se estiró las mejillas hacia atrás con los cantos de las manos para verse
como había sido de joven, y vio su propia máscara con los ojos chinos, la nariz
aplastada, los labios intensos. Pasó por alto las primeras arrugas del cuello, que no
tenían remedio, y se mostró los dientes perfectos y bien cepillados después del almuerzo
en el transbordador".