'Horizonte', una película de César Augusto Acevedo sobre la muerte

El ganador de la Cámara de Oro en Cannes por La tierra y la sombra (2015), César Augusto Acevedo, vuelve a la pantalla grande con Horizonte, película que hizo para de la selección oficial del Festival Internacional de Cine de Toronto (TIFF).

Separados en vida por culpa de la violencia, Basilio y su madre Inés, comprenden que su reencuentro solo se debe a que ahora están muertos. Pero al no hallar en aquel lugar señales del padre desaparecido, deciden partir en su búsqueda, emprendiendo un viaje físico y espiritual a través de un paisaje completamente devastado por la guerra: con pueblos destruidos, campos abandonados, ríos convertidos en cementerios e innumerables historias de desolación y muerte.

Todo esto provocado por Basilio, quien en vida se convirtió en un criminal salvaje y que ahora se ve obligado a revivir una y otra vez todo el horror de aquellos actos cometidos, pero en esta ocasión, con su madre como testigo. Al final, en una tierra donde toda esperanza parece haberse perdido, solo a través de grandes sacrificios lograrán alcanzar la redención que tanto anhelan, comprendiendo finalmente cuál es el verdadero valor de la vida. Mira el tráiler de horizonte a continuación.

La película de 125 minutos es un drama protagonizado por Claudio Cataño (Cien años de soledad, Estimados señores) y Paulina García Alfonso (Gloria).

"Esta película nació de mi propia desesperación, de vivir en un país que se ha acostumbrado tanto a la muerte que ha olvidado por completo el verdadero valor de la vida. Y duele reconocerlo, duele ver cómo no solo nos hemos insensibilizado ante la violencia, sino que cada vez nos cuesta más sentir empatía por el dolor ajeno. ¿O cómo podemos entender, si no, lo absurdo de querer perpetuar una guerra en la que todos los ejércitos están formados por los hijos de una misma tierra?", comenta el director.

Y continúa diciendo "Por eso, mi intención con 'Horizonte' es que reconozcamos las vidas cegadas de cientos de miles de colombianos asesinados y desaparecidos en medio del conflicto armado colombiano. Que dejemos de pensar en ellos como simples números o estadísticas y entendamos que fueron seres humanos, como nosotros, con familias, con sueños, con razones para vivir".