Frases de Alcolirykoz para arrancar la temporada de fin de año
Por: Milena Perdomo
Si existe un sonido para el fin de año, aparte del chucu-chucu, es el de Alcolirykoz. Cada vez que se acerca la Navidad y el fin de año empiezan a sonar de nuevo grandes temas como Sancocho en leña, La Típica, Baño de ruda, entre otras. Para calentar motores y empezar el consumo mínimo vital de natilla y buñuelo, hemos querido hacer una selección de frases emblemáticas e imperdibles para darle la bienvenida a diciembre.
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La Típica
Con su mezcla de parlache (el lenguaje popular paisa) y sampleos de música tropical, los AZ nos narran la Navidad en los barrios de Medellín. En La Típica tiran un factazo sobre la nostalgia del año que se acaba: “Llegaron los aguinaldos, días festivos con amargos recargos”. Siempre fieles a su estilo y cantando sobre la realidad de la ciudad, nos dejan una barra sobre la lucha de clases, evidente en la gentrificación, al decir: “Medallo es un pesebre, los santos son más grandes que las casas de los pobres”.
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En su lógica de rendir homenaje a los sonidos con los que crecimos las y los colombianos en las fiestas y las amanecidas, nos recuerdan que “suena Cariñito de Rodolfo y Marioneta de cartón”, para evocar el paisaje sonoro de la época.
Hay una frase magistral en La Típica que hace gala del parlache, explicando con humor e ironía la cultura paisa en Navidad: “Al hijo de doña Consuelo le robaron la plata de la natillera por buñuelo”. A riesgo de parecer intelectuales de esquina, explicamos ese verso magistral: “natillera” se refiere a una forma de ahorro popular en la que un vecino recoge el dinero de varios y lo distribuye por turnos; y “buñuelo”, como adjetivo, se refiere a una persona con poca lucidez. Altísimo juego de palabras de Gambeta.
Para cerrar las frases de La Típica, encontramos otro factazo de Kaztro: “No habrá traído y se quejaron, la vida también es un regalo, pero nunca lo entendieron”. Sobran interpretaciones.
Baño de Ruda
La siguiente canción decembrina, Baño de ruda, nos evoca imágenes de La vendedora de rosas, película emblemática de las navidades en Medellín, y literalmente lo mencionan en un verso: “Cada Navidad parece dirigida por Víctor Gaviria”. Además, traen a colación prácticas populares de la época como los “baños de ruda y agua fría”.
Sancocho en Leña
También el tema Sancocho en Leña, que desde el nombre anticipa el sentido de la canción, evoca una escena de esa película: “un chorro de cuenta del chirrete”.
En la afirmación “nosotros no cambiamos por nada el rancho de la abuela el 24” nos narran como nación popular. ¿Quién no se junta con el resto de la familia en la cena de Nochebuena para bailar con la mamá o la tía? ¿O quién no sale en Año Nuevo con la maleta, dándole la vuelta a la manzana y practicando este verso?: “Le digo feliz año a todo el mundo en cada rose”.
Piñata en el 301
Piñata en el 301, para cerrar, nos deja una frase propia del mestizaje entre la concepción de la Navidad del norte global, el parlache y la cultura de Medellín: “Carbón de traído si se portan mal”.
Y, para cerrar del todo: “Natilla a precio de derrumbe, alcohol pa’ las heridas”, una barra poética y popular sobre las delicias gastronómicas de la época y la sensación de nostalgia propia del año que se acaba, que junta todas las heridas que desaparecen momentáneamente al calor del vinito.
Alcolirykoz se convirtió en la banda sonora navideña para toda una generación gracias a su mezcla de frases del sentido común con sonidos que viven en el fondo de nuestras tradiciones y nos recuerdan, en estas fechas, la verdadera esencia de la vida colectiva.
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