La fe es algo muy poderoso. Es el motor que mueve a millones de personas de todo el mundo. La fe le da sentido a la vida, moldea las conductas y da consuelo cuando todo está muy mal y no parece existir una esperanza. Pero esta también puede nublar el criterio y producir conductas muy nocivas, violentas y peligrosas. Por eso, uno de los actos más viles que puede realizar un ser humano, es manipular la fe del otro para abusar y llenarse de poder, a costa de lo que una persona considera que es lo más sagrado.

Los falsos profetas han existido desde siempre y suelen ser personas muy inteligentes, que saben leer muy bien a las personas y se aprovechan de su vulnerabilidad para lograr sus fines. Carisma, belleza, inteligencia, son algunas de las características de estos personajes que han desarrollado el don del engaño para cautivar a sus seguidores y usarlos a su voluntad.

A lo largo del siglo XX se vieron varios casos de estos líderes perversos, en su mayoría hombres, que crearon cultos e hicieron mucho daño. Los asesinatos de La Familia comandada por Charles Manson de 1969; el suicidio colectivo de Jonestown donde, en 1978, 918 seguidores de Jim Jones se quiatron la vida por orden de su líder; o los ataques con realizados en 1995 en el metro de Tokyo con gas sarín por los fanáticos de Shōkō Asahara son algunos de los ejemplos más mediáticos.

Pero, a pesar de que los cultos son considerados peligrosos, estos siguen apareciendo y reclutando personas que buscan un consuelo, una luz de esperanza, un sentido para la vida o simplemente una motivación. Muchas de las personas que caen en los cultos tienen un perfil similar de vulnerabilidad, enfermedad mental y soledad que estos falsos profetas aprovechan para venderles la salvación y la felicidad, pero muchos otros simplemente son personas que creen que están siendo rebeldes e iluminadas que caen en el mismo delirio de salvadores de sus líderes. 

La cuestión es que los cultos suelen ser tan fuertes en sus convicciones que una vez que alguien entra es muy difícil que cuestione a su líder y dependiendo del poder o influencia que este tenga puede ser muy peligroso. Incluso hay quienes al verse tan cerca a este poder, fungen como cómplices solo por tener el buen visto de su salvador y compartir un poco de su falsa gloria.

Pero lo más complejo de esto es que cualquiera de nosotros puede caer en esta trampa, porque los cultos no necesariamente son religiosos, casi todo se puede volver un culto. La política, la ciencia, la psicología, la sexualidad, hasta la música. Solo se necesita un líder carismático y una causa en la cual creer.

Por eso repasamos estas seis producciones que cuentan la historia de distintos cultos, sus líderes y víctimas, que nos sirven como un recordatorio de que siempre hay que cuidarse de los seres de luz, porque estos nunca muestran su sombra.

Se dócil: Oración y obediencia

La iglesia Fundamentalista de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días es el ala más radical y conservadora de la religión Mormona, y durante muchos años una facción estuvo dirigida por Warren Jeffs, quien sucedió de forma polémica a su padre. Warren creó un culto que giraba en torno a él. Este perverso hombre, convenció a sus seguidores que él era el último profeta y que dios le hablaba, entre las órdenes que le daba estaba permitir que los hombres más fieles de su comunidad se pudieran casar con cuantas mujeres quisieran sin importar la edad de estas.

Pero además logró construir un pueblo aislado en el que explotaba sexualmente a las mujeres de la comunidad y esclavizaba a los hombres jóvenes, quienes prestaban mano de obra. Su poder fue tan grande que logró derrotar a todos sus cuestionadores y arrebatarles sus familias, propiedades y su dinero. Luego de una extensa investigación, Warren fue capturado y condenado a cadena perpetua, pero desde la cárcel sigue dando órdenes. A través de imágenes de archivo y testimonios de sobrevivientes, desertores y familiares de Jeffs, la serie de Netflix Se dócil: Oración y obediencia cuenta esta perturbadora historia.

Heaven's Gate: The Cult of Cults

Marshall Applewhite y su pareja Bonnie Nettles, conocidos como Bo y Peep, manejaron un culto extraterrestre desde finales de los 70 hasta 1997 llamado Las Puertas del Cielo. Este prometía la inmortalidad del alma y la elevación a un nuevo nivel evolutivo a través de la bendición de los antiguos astronautas, que se comunicaban con Applewhite quien daba sus sermones usando frases de la serie Star Trek.

La influencia de Applewhite era tan fuerte que sus seguidores le hacían caso sin cuestionar absolutamente nada de lo que les pedía, lo cual podía ser desde cambiar sus nombres y afeitar su cuerpo, hasta vivir una vida como nómadas. Pero las cosas se complicaron tras la muerte de Nettles en los 80, lo que hizo que Applewhite se volviera más radical y controlador. Esto llegó a un punto tan complejo que, en el 97, justo cuando pasó el cometa Hale, este falso profeta se suicidó con 38 de sus seguidores.

Usando material inédito y entrevistas a sobrevivientes, familiares e investigadores de Las Puertas del Cielo, esta serie de HBO Max cuenta la historia de uno de los cultos más polémicos de los últimos 30 años.

Seduced: Inside the NXIVM Cult

Uno de los casos mediáticos de cultos más recientes es el de NXIVM, liderado por el infame Keith Raniere, quien creó una red de control internacional con la cual abusaba física, sicológica y sexualmente de las mujeres que pertenecían al culto. En 2019 Raniere, quien controlaba el peso, la vestimenta y hasta marcaba con fuego a sus víctimas, fue encarcelado, pero dejó un vacío muy grande en las vidas de sus seguidores.

Pero a parte de la sevicia con la que actuaba, una de las cosas que más llamó la atención de Raniere, es que convenció a personajes prominentes de Hollywood y hasta hijos de políticos. Y una de las personas más famosas que cayó en su red fue India Oxenberg, hija de la actriz Catherine Oxenberg, quien en esta serie de Starzplay, disponible también en Amazon Prime, cuenta por primera vez su historia, el horror que vivió y el por qué no salía del culto e incluso lo defendía a muerte a Keith Raniere.

The Way Down

Gwen Shamblin Lara fue una líder religiosa que se volvió famosa luego de empezar un programa para adelgazar, que luego se juntó con el cristianismo. Esto creó una especie de secta cristiana llamada Remnant Fellowship donde predicaba que la delgadez era algo que acercaba a las personas a dios y donde se proclamó como una profeta.

Con el tiempo empezaron a aparecer denuncias de abuso e incluso esta iglesia estuvo involucrada en la muerte de un jóven. Esta serie de HBO MAX, investiga la historia de esta líder y sus presuntos abusos lo cual no ha sido del todo resuelto porque ella murió en un accidente aéreo en 2021.

Q Into the Storm

Si bien esta serie no habla de un grupo religioso o de un líder carismático, sí se enfoca en una especie de culto masivo que ha atrapado a miles de personas que siguen fielmente lo que se conoce como Q Anon. El periodista Cullen Hoback se puso la dura tarea de explicar qué es esto y encontrar al líder a quien llaman Q. Este fenómeno de internet ha crecido tanto que fue el detonante del famoso Asalto al Capitolio de Estados Unidos que ocurrió el 6 de enero de 2021 y a parte ha producido que sus seguidores entren armados a pizzserias donde supuestamente violaban menores de edad e incluso ha generado teorías tan absurdas como que John F Kennedy está vivo e iba a volver para ser la fórmula vicepresidencial de Donald Trump.

Esta serie de HBO MAX nos lleva a los lugares más oscuros y complejos del internet y a lo profundo de la psiquis humana y cómo la gente es capaz de creer cualquier cosa que justifique sus ideologías o que explique sus preocupaciones.