La Mosca Tsé- Tsé y el secreto para convertir el desamor en una fiesta
Desde su formación en 1995, la banda argentina La Mosca Tsé-Tsé (ya popularizada como La Mosca) ha conquistado Latinoamérica y el mundo con una fórmula musical inconfundible: tomar el dolor del desamor y el despecho, vestirlo con un ritmo agitado y convertirlo en un himno de fiesta. Convirtieron el lamento rockero en una invitación a bailar, a pesar de tener el corazón roto.
Cómo inició el fenómeno
La historia de La Mosca comienza lejos de los grandes estudios de Buenos Aires, la capital, en la pequeña ciudad de Ramallo a mediados de los 90. La banda nació de la fusión de dos grupos locales: Damas Gratis (liderada por Guillermo Novellis y distinta al grupo de cumbia villera de Pablo Lescano) y La Reggae and Roll.
Llegar al éxito parecía algo utópico: eran un grupo numeroso, sin contactos en la industria musical y provenían del interior del país. Como muchas otras bandas del momento, comenzaron en los bares, donde se dieron cuenta de que no era tan descabellado soñar con más.
Tras unas cuantas presentaciones lograron reunir lo suficiente para componer y grabar cuatro demos en un estudio local (¡en solo 12 horas por lo bien ensayados que estaban!) y llevarlos personalmente a las discográficas de la capital. Esta estrategia funcionó, y su sonido llamó la atención de inmediato.
Su nombre, "La Mosca Tsé-Tsé", tiene dos partes: "La Mosca" viene de un juego de cartas local. Le agregaron "Tsé-Tsé" (como el insecto africano) cuando registraron el nombre porque el primero ya estaba ocupado, y coincidentemente representaba su idea: una mezcla entre lo local y los ritmos latinos, que fueron influenciados por los africanos.
La fuerza de La Mosca no está en usar frases muy complicadas, sino en la sinceridad con humor de sus letras y en que cualquiera se puede identificar con ellas. Sus canciones más populares hablan de amor, de rupturas, y de los problemas de la vida diaria, pero siempre con un tono de picardía.
El himno para dejar atrás el pasado "Para no verte más” es el mejor ejemplo del despecho feliz. La canción acepta que te hicieron daño, pero lo hace con una actitud de "no te voy a dar el gusto de verme triste". Es una venganza sentimental que se baila.
Señal Colombia te cuenta más de su historia
¿Cuál es el secreto de La Mosca para convertir el desamor en fiesta?
La respuesta es sencilla: su sonido. Si el rock normal se enfoca en la fuerza de la guitarra eléctrica y la percusión, el corazón del sonido de La Mosca está en sus instrumentos de viento (trompetas y trombones). Estos son el motor que da vida al "mosquero" y le dan ese sabor caribeño de la música alegre (merengue y salsa) mezclado con el rock y ska, que hacen incluso pasar la letra a un segundo plano como ocurre en otros géneros como la salsa.
Esta música, que Novellis dice que es una "sensación inexplicable", tuvo un éxito curioso: primero conquistaron países como México y Colombia, y después se hicieron famosos en su propia Argentina.
Al juntar lo directo del rock con lo alegre de los ritmos tropicales, La Mosca Tsé-Tsé hizo del rock fusión una salida de emergencia para todos: si tienes el corazón roto, al menos pon música y baila. Es la idea de que la mejor forma de superar un mal momento es con una buena orquesta de fondo.
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Si bien el desamor es su motor principal, las letras de La Mosca Tsé-Tsé son más amplias y se caracterizan por una observación social con humor y mucha picardía. Abordan temas cotidianos como la amistad, las ganas de vivir, y también la crítica social con un tono de travesura, evitando el sermón y prefiriendo el sarcasmo.
Más allá de su música, la banda se hace memorable por su identidad visual: la figura de Guillermo Novellis con sus características gafas oscuras en forma de ojos de mosca lo convierte en un frontman inmediatamente reconocible. Además, su formación numerosa (con hasta diez músicos en escena) garantiza que la energía del "mosquero" se traduzca en un espectáculo en vivo arrollador que no te podrás perder el 8 de noviembre en Santa Marta durante la Gran Muestra Cultural del País de la Belleza.