El misterio de Rosalía
Desde el lanzamiento de Motomami en 2022, Rosalía no había dado señales claras de un nuevo álbum. El universo que construyó La Rosi en ese entonces se expandió como álbum pero también como concepto.
Su mezcla de glitch, hiperreferencias, reggaetón, hyperpop, bachata y experimentación sonora, Motomami definió una nueva estética. Ser una “motomami” implicaba adoptar una identidad: códigos visuales, valores y una actitud frente al mundo.
Pero construir un nuevo universo lleva tiempo.
En el libro Ensayos sobre el buen querer, el escritor Jorge Carrión describe a Rosalía como una artista “doblemente bilingüe”: habla catalán y castellano, pero también analógico y lo digital. Esa idea encaja perfectamente con las estrategia de comunicación que ha utilizado hasta entonces. Ahora tomó un camino más íntimo y fragmentario.
El 4 de septiembre, Rosalía publicó por primera vez una nota en Substack, plataforma conocida por sus newsletters.
Desde entonces, ha compartido mensajes en forma de cartas poéticas y fragmentos conceptuales que parecen anticipar un nuevo ciclo creativo.
Pero el verdadero misterio, sin embargo, apareció con una publicación titulada “BERGHAIN”: una partitura enviada directamente a los suscriptores. Los fans, intrigados, la interpretaron y subieron múltiples versiones a internet, convencidos de que podría tratarse de una nueva canción.
En el archivo de la partitura también aparecía una nota enigmática: “Barroco 108”. Una referencia al tempo —108 beats por minuto— y quizás también al barroco musical, época que Rosalía ya ha explorado antes, pero ahora combinada con el espíritu industrial de Berghain, el legendario club techno de Berlín.
Las pistas del nuevo álbum de Rosalía: ¿Lux?
Las señales que ha dejado Rosalía dibujan un equilibrio entre lo divino y lo terrenal, lo místico y lo tecnológico. En otra publicación de Substack, titulada “Una escalera hacia Dios”, escribió:
“Si cantas, luchas, pero del lado contrario del abandono. Cantar es una carta de amor a la verticalidad, una escalera hacia Dios.”
La frase refuerza la dimensión espiritual de su nueva narrativa. Pero la pista más certera llegó en una publicación en X, donde escribió una sola ecuación:
“LUX = LOVE”.
Los fans interpretaron que podría ser el título de su próximo álbum —un juego entre luz, amor y trascendencia.