Maradona en canciones
Un 30 de octubre de 1960 el mundo recibió a la leyenda incomparable del fútbol, Diego Armando Maradona. Hoy recordamos su natalicio de las canchas a las letras de muchos artistas para quienes el fenómeno popular nacido en Argentina fue fuente de inspiración.
Rodrigo – La Mano de Dios
Su mítica figura estuvo siempre rodeada de momentos épicos. En medio del conflicto impulsado por la dictadura y el imperialismo inglés, inmortalizó un gol hecho a la Inglaterra de Thatcher con la mano. Conocido como La Mano de Dios, el episodio se convirtió en uno de los momentos más mágicos del fútbol y es el nombre de la canción escrita por Rodrigo a ritmo de cuarteto cordobés.
El tema, lanzado en 1999, se convirtió en una especie de misa popular que une el fervor del estadio con la devoción de un país entero. Cada vez que suena se celebra al Diego como mito y como hombre. En cada fiesta, en cada cancha o reunión barrial, la voz de Rodrigo vuelve a recordarlo con la emoción intacta y con la certeza de que fue el Diego de la gente, el más grande que hubo.
Manu Chao – Si yo fuera Maradona
El homenaje del músico franco-español a Maradona es una de las piezas más recordadas de su álbum Clandestino de 1998. En esta canción, Manu Chao reflexiona sobre el peso de la fama, el exceso y la libertad, y usa a Maradona como símbolo de lo imposible al cantar “Si yo fuera Maradona, viviría como él”.
Más que una canción sobre fútbol, es una reflexión sobre el costo de la gloria y el precio de ser libre. Manu Chao no lo juzga ni lo idealiza, lo comprende desde la empatía y la rebeldía. Años después, el propio Maradona bailó junto a él en el documental Maradona by Kusturica, un encuentro que unió dos espíritus inconformes frente al mundo.
Andrés Calamaro – Maradona
En su álbum Honestidad Brutal de 1999, Andrés Calamaro le dedicó una de las canciones más entrañables y sinceras del rock argentino. La frase “Maradona no es una persona cualquiera” resume el sentir de un pueblo que lo vio caer y levantarse una y otra vez. La letra suena como una conversación cercana entre amigos, escrita con afecto y gratitud.
Calamaro retrata al Diego sin artificios, con humanidad y ternura. No hay épica ni exageración, solo cariño. Esa cercanía convierte la canción en una declaración de amor hacia un ídolo que fue tan humano como extraordinario. Es el abrazo de la música a un hombre que fue mucho más que fútbol.
Los Piojos – Maradó
Desde el rock barrial, Maradó de Los Piojos se transformó en un canto de estadio y en una celebración de la alegría popular. Con guitarras encendidas y un estribillo coreado por miles, la canción recuerda al pibe que salió de Fiorito para conquistar el mundo llevando siempre la camiseta argentina sobre el corazón.
Es una canción que no se escucha sino que se grita. Más allá del homenaje, Maradó condensa la emoción colectiva, la identidad del barrio y la pasión del fútbol. Es el eco de un pueblo agradecido que convirtió su historia en un coro eterno.
Bonus track: Opus – Live Is Life
Como bonus track vale recordar Live Is Life de la banda austríaca Opus, una canción que no fue escrita para Maradona, pero que quedó unida para siempre a su nombre. En 1989, durante la semifinal de la Copa de la UEFA frente al Bayern Múnich, Diego realizó un calentamiento legendario al ritmo de esta canción mientras jugaba para el Napoli. Con total soltura y una sonrisa cómplice, dominó el balón al compás de la música y convirtió ese momento en pura magia.
La leyenda popular de Maradona y su actitud irreverente, sin miedo al poder, hacen falta en medio de un mundo que cada vez muestra con más descaro su rostro autoritario. Recordarlo en canciones es también una forma de reconocer las contradicciones del tiempo que habitamos y la necesidad de más humanidad en nuestras estrellas, de figuras que interpelen, que incomoden y que nos recuerden quiénes somos.