'Ciro y Yo': la historia más oscura de Colombia, en salas de cine

Cuando Miguel Salazar afirmaba que tras 20 años de amistad con Ciro Galindo comprendió que su vida resume la historia de Colombia, lo dudé, pensé en la turbulenta historia de este país durante el siglo XX, en esa guerra civil no declarada que se caracterizó por ser extremadamente violenta, cargada de asesinatos, agresiones, persecuciones, destrucción de la propiedad privada y terrorismo por afiliciación política; liberales, conservadores, 'Los Chulavitas', 'Pájaros'...

También pensé en el siglo que me tocó a mí -porque lo demás hace parte de la historia, esa que dejaron de enseñarnos en las escuelas y que a duras penas nuestros padres y abuelos nos contaron-, pensé en el surgimiento de la Farc, en la zona de despeje, en Andrés Pastrana, en el Plan Colombia, en la ola infinita de secuestros, en el surgimiento de todos los grupos armados al margen de la Ley que han hecho tan particular la historia de este país y en los paramilitares, en Álvaro Uribe Velez. 

Pensé, claro, en todas las víctimas, en las que he conocido, en las historias de quienes lo perdieron todo y siguen buscando los cuerpos desaparecidos de sus familiares con la vaga esperanza de que aún sigan vivos. Pensé en todo lo que tenía en la cabeza mientras Miguel en los primeros minutos de su documental nos relataba su primer acercamiento con Ciro y su familia, esposa e hijos... 

No me cupo en la cabeza que la historia de un solo colombiano, 1 solo hombre, resumiera la historia de este país, pero la vida de Ciro, tras ver la única sonrisa que se le retrató en el documental de Miguel Salazar en el plano final de la película, me confirmó lo que dudé en un principio, la historia de Ciro Galindo resume la historia de Colombia, si hacemos el recorrido con la mirada de Miguel Salazar, quien se encarga de recrear cada uno de los más violentos capítulos de la guerra en Colombia a través de los personajes de esa familia que conoció en la La Serranía de la Macarena cuándo apenas tenía 20 años y viajó a retratar Caño Cristales, para muchos el río más hermoso del mundo, sin saber que el trágico episodio que nos anuncia la sinopsis de su documental, sería el comienzo de una larga relación con Ciro, el padre de Jhon, quien con 14 años le sirvió de guía y tras un salto al río nunca volvió a salir. 

 "en diciembre de 1996, durante un viaje que hice a tomar fotos a Caño Cristales en la Serranía de La Macarena, mi guía de 14 años, John Galindo, se ahogó frente a mí. En la noche, sin saber cómo decirlo, le conté a su padre, Ciro, que su hijo se había ahogado. Todo lo que pasó ese día, el destino refrendó con una amistad que hoy continúa...."

Ciro y Yo (2017) es una cita obligada en la sala de cine con Colombia y con quienes han cargado sobre sus hombros el peso de esta guerra, un llamado al perdón pero no al olvido, un grito que suplica justicia.

La historia de Ciro Galindo los hará ver con otros ojos la historia de este largo conflicto, como lo dice también Miguel Salazar, a donde quiera que Ciro ha ido, la guerra lo ha encontrado, y como dice Ciro, él y su familia fueron y siguen siendo víctimas de todos los grupos que ustedes imaginen, del ejército, de las Farc, de los paramilitares...

Tienen que ver este documental para acercarse a través de los ojos de Miguel y las historias de Ciro a la vida de un hombre que hoy perdona, pero no olvida, y no por orgullo, por dignidad, por justicia. 

Ciro decidió contarnos su historia, Miguel Salazar supo seleccionar los fragmentos adecuandos y contextualizarlos con la historia de Colombia, entregándonos una película que en numerosas secuencias fotográficas relata y recrea la historia de un ciudadano que podría ser cualquiera de nosotros, sí, Ciro, podría ser Oscar, Iván, Camila o Alejandra.