'Casa Babylon' de Mano Negra cumple 30 años

Por: Santiago Arango Naranjo

Iniciando la década del 90, a sus 29 años de edad, el músico Manu Chao decía con soltura en una entrevista: "Nuestra música es mestiza. La gente está harta del dominio musical anglosajón", haciendo referencia directa a la propuesta multicultural y artística del grupo Mano Negra. 

Esa declaración de más de 30 años atrás no fue ni jactanciosa ni desfachatada, todo lo contrario, fue un manifiesto creativo y político respaldado a través de sus canciones nutridas de raíces flamencas, rap, salsa, rock, dub, gospel, chanson francesa y reggae. 

Y es que Manu Chao lo tenía claro desde que se gestó el grupo; en entrevista para El País de España, comentaba en aquellos días: "Hay otras cosas, aunque todos procedemos del rock. Incorporamos diferentes elementos de manera natural y tenemos por norma no hacer nada forzado. Queremos mantener la espontaneidad, porque por nuestros orígenes podemos abarcar muchas músicas. Todo lo que utilizamos como influencia lo hemos digerido previamente, incluso los diferentes idiomas en que cantamos".

Creado en 1987, Mano Negra legó 4 discos de estudio que anticiparon desde su sonoridad un futuro híbrido por excelencia con la llegada del Internet: el siglo XXI, este de la revolución que detonaron las tecnologías digitales en las sociedades, con las redes sociales, las apps, el desarrollo del teléfono inteligente y el posicionamiento de las plataformas de streaming… un siglo donde podemos acceder con un clic a músicas de África, Islandia, Francia, Perú, Argentina, Italia o España...

Tras su disco debut llamado Patchanka (1988), seguido de Puta’s Fever (1989) y King Of Bongo (1991), algunas canciones se constituyeron en himnos hasta hoy, gracias a títulos como "Indios de Barcelona", "Mala vida", "Peligro", "King Kong Five" y "Soledad"; tras esos éxitos,  fue publicada en 1994 su cuarta y última placa de estudio, que cumple tres décadas en 2024: Casa Babylon. 

Integrado por 16 canciones, este álbum discográfico ratificó esa mixtura sonora que había definido a la banda en sus placas predecesoras, así que el rap, el punk, el dub, el reggae, la salsa, el ska y múltiples exploraciones electrónicas, hicieron de este un disco fundamental, tanto por el sonido mestizo y las alegorías a Latinoamérica, como por su contenido social, bailable y reflexivo. 

Y no es exagerado argüir que Casa Babylon fue el disco más cercano de Mano Negra a la idiosincrasia de Latinoamérica tanto desde lo musical, como desde el componente lírico: homenajeó al ídolo del fútbol Maradona con "Santa Maradona", respaldó al Ejército Zapatista de México con "Viva Zapata",  grabó el videoclip de la canción "Señor Matanza" en Bogotá (Colombia) y citó al poeta cubano José Martí. Además, participó en el disco el reconocido músico argentino Fidel Nadal, que integraba por esos días la agrupación Todos tus muertos.

La banda liderada por Manu Chao -y creada con su hermano Antoine Chao- cantó en castellano, francés, inglés y árabe; abordó temas como la libertad, la violencia, las desigualdades económicas, el fútbol, la fiesta y los malos amores. Por ejemplo, en "Viva Zapata", canción que abre Casa Babylon, se repite la arenga revolucionaria popularizada por la histórica agrupación chilena de canción social Quilapayún, “el pueblo unido, jamás será vencido”; por su parte, en "Bala perdida", "Sueno de Solentiname" y "Machine Gun", ahondan en el dolor de violencia y la guerra; y en "La vida me da palo" referencian el aguante popular y brechas sociales cuando cantan: “El mundo es una puta pa’ todo lo que hay que pagar”. 

Como antecedente adicional a la publicación del álbum, es necesario mencionar que el espíritu combativo, callejero y arriesgado del grupo, reflejado en sus canciones, los sacó a las avenidas de España, Francia y de otros países a ofrecer conciertos; también, los aventuró a memorables expediciones como Cargo 92, que consistió en adecuar un barco carguero para la gira marítima conjunta de cuatro colectivos artísticos: Philippe Decouflé, Philippe Genty, Royal de Luxe y Mano Negra, llegando a puertos y ciudades de Venezuela, Brasil, República Dominicana, Uruguay, Argentina y Colombia. 

Otra de esas expediciones esenciales desde la concepción artística de Mano Negra fue "El Tren de Hielo y Fuego" -para muchos, un detonante en la separación de la banda por el desgaste que esta significó- y que representó recorrer parte de Colombia en tren.  Así se narra en radionica.rocks:

“El 15 de septiembre de 1993 un grupo de músicos, cirqueros y tatuadores partieron desde Bogotá hasta Santa Marta en tren. Recorrer Colombia en un tren lleno de arte con un espectáculo itinerante al que cada vez se sumaran más artistas, fue la idea que se le ocurrió un año antes, en 1992, a la Asociación Francesa de Acción Artística. El nombre que le dieron a ese sueño fue “El Expreso del Hielo” y la banda protagonista de este viaje venía desde Francia. Una agrupación que hasta ese momento a través de su música le había dado un giro radical al encuentro cultural entre inmigrantes. Una banda liderada por un joven llamado José Manuel Arturo Tomás Chao Ortega a quien hasta la fecha conocemos como Manu Chao”.

De este último peregrinaje en tren surgieron algunas de las semillas de Casa Babylon, una colección de canciones que tienen una estrecha relación con Colombia y Latinoamérica, tanto así que Honder, un niño habitante de calle que el grupo conoció y que los acompañó en el “El Expreso del Hielo”, terminó como protagonista del videoclip de Señor Matanza.

“Escogimos a Colombia porque queríamos que interviniera Honder, el niño callejero que viajó con nosotros en El Expreso del Hielo. Los paisajes de este país nos servían, pero ese no era el objetivo. Cuando llegamos no lo pudimos encontrar, los buscamos por todas partes y nadie dio razón de él. Antes de irnos lo dejamos viviendo donde una amiga, pero él es un niño de la calle y aparece y desaparece sin dejar huella.El caso es que cuando estábamos filmando en San Victorino, Honder apareció de repente. Inmediatamente, lo vinculamos e hicimos las tomas que necesitábamos”, contó en 1995 Manu Chao al periódico El Tiempo. Y sí, Honder aparece bailando y sonriendo en la canción, uno de los grandes hits del grupo.

30 años después la herencia del disco Casa Babylon y su indudable aporte al mestizaje sonoro entre Europa, América y África, ligado a todos sus álbumes, la música de Mano Negra sigue vigente en los bares, en las fiestas de amigos y en la radio, pues sus canciones siguen sonando con ese olor permeado de asfalto, montaña y mar, sudor de pogo y aire del mañana. Al fin de cuentas, “si la vida me da palo, yo la voy a espabilar”. 

Escucha el disco completo aquí: