La tradición musical de Colombia escribió el cierre del FEP 2017

La tradición musical de Colombia escribió el cierre del FEP 2017

Cumbia, currulao, reggae, dub, electrónica, hip hop. 'Fusión' fue la insignia del tercer y último día del Festival Estéreo Picnic 2017. Les contamos los detalles... 
Domingo, 26 Marzo, 2017 - 06:45

Por: Radiónica

El día más sabroso, decían algunos, el día más caliente se escuchó en las tarimas. Por la memoria de nuestras tradiciones, por nuestro pasado y nuestro presente sonoro... El Festival Estéreo Picnic cerró su edición del 2017 con una fiesta de sonidos tradicionales donde brillaron personajes como Totó la Momposina, Nidia Góngora con su Canalón de Timbiquí, Elkin Robinson desde el mar Caribe, Quantic rindiendo homenaje con su jazz y funk a la tradición sonora colombiana y Mateo Kingman llevándonos al Amazonas con su electrónica experimental.

Elkin Robinson

El escenario 3 del festival abrió sus presentaciones del día final con sonidos que nos transportaron a Providencia, a nuestro mar Caribe, a la playa, más cerca del sol. Elkin Robinson y su banda de 5 integrantes nos demostraron por qué los sonidos isleños de nuestro país son tan importantes. Con One Love como su consigna principal y una sonrisa que contagió a los espectadores de toda su buena energía, el show de Robinson en el Picnic nos puso a bailar con canciones como Sun A Shine, Creole Vibration y Hyman the Fisherman.
Un concierto sencillo pero con toda la buena vibra necesaria para calentar la tarde gris del día 3 de Estéreo Picnic. Aplausos para Elkin, su banda, sus canciones hechas con amor y su entrega en tarima.


Canalón de Timbiquí

Puntos para el festival por incluir en su cartel a una de las bandas más representativas de los sonidos tradicionales del Pacifico. Como lo dijo Nidia Gongora "Vamos a hacer del Picnic un Petroncito" haciendo referencia al festival de Cali, segunda casa de estos abanderados de los sonidos afros de nuestra tierra. 
Canalón ha estado decididamente vinculado al movimiento empresarial que han ido creando certeramente los mercados culturales en Colombia, el pasado BOOM tuvo en sus showcases uno destinado para este proyecto que ha ido construyendo de tarima en tarima un espectáculo que pone en evidencia aspectos bastate característicos de la cultura pacífica.
En Estéreo Picnic la banda brilló con luz propia, la marimba armó la fiesta y la tarima en la que estuvieron fue definitivamente 'la más caliente del festival". ¡Hubo currulao' y todo el mundo celebró!
 

Totó La Momposina

Al hablar de su presentación en Estéreo Picnic, Totó La Momposina hablaba con serenidad y experiencia acerca de llevar su música a un espacio de la escena alternativa colombiana. Pues no por nada es una de las artistas, no sólo más representativas sino más relevantes de nuestra cultura, y esto la ha llevado por el mundo entero e hizo que aterrizara en el Picnic en 2017. 

La música ancestral debería tener cabida en cualquier escenario del país, y con éxito, este festival logró incluir proyectos que podrían parecer más tradicionales como Canalón de Timbiquí, Elkin Robinson y hasta la misma Totó, sin embargo, son estos los artistas que configuran y construyen la arquitectura musical de Colombia, y los que cuentan las historias de las ciudades, el mar, el campo y la sociedad desde otra mirada. 

Con 10 músicos en escena, Totó creo un vaivén musical con el público que hizo que todos se conectaran en su viaje y fácilmente se convirtieran en sus "pescadores con atarraya". Y es que las de Totó, son canciones con las que hemos crecido y con las que nos sentimos identificados o representados culturalmente, por eso fue común ver entre el público no sólo cuerpos moviéndose sino a más de uno cantando al unísono con nuestra momposina por excelencia. Cumbia, bullerengue y los sonidos tracicionales del Caribe fueron protagonistas de este concierto que con seguridad sentó un precedente para la concepción del Festival Estéreo Picnic como un escenario coherente con el contexto en el que surge: Colombia. ¡Aplausos de pie para Totó La Momposina siempre!


Mateo Kingman

Misterio, densidad, tierra, libertad. Mateo Kingman en definitiva logra llevarnos a las espesas atmósferas que lo vieron crecer. Si no conocen la selva, este ecuatoriano puede llevarlos con su música, una oda a la libertad, al acto de volar y ser, sólo ser. Con 3 músicos en el escenario Mateo logra llevarnos con facilidad de un estado emocional a otro totalmente opuesto. 
La danza, el despojo, la incertidumbre, el agua, la sal y el pantano. Amor y tranquilidad transmiten sus canciones y sus particulares sonidos; si lo que busca es plasmar en su música la forma que tiene de ver la vida y disfrutar la soledad, logra conectarnos por lejos que estemos de si quiera imaginar lo que tiene en mente. Síganle la pista a este proyecto, escuchen el álbum debut y permítanse explorar usando los oídos. 


Nawal

Este show representaba para los chicos de Nawal el resultado de años de trabajo y su regreso a la escena nacional. Esta agrupación que muchos reconocen por sus orígenes en el reggae y el dub, ha demostrado que con los años llegaron inquietudes por otros sonidos más rockeros, eso sí, sin dejar su esencia. 
 
Con un montaje de 8 músicos en escena, y unas visuales en las que trabajaron conceptualmente como banda, Nawal llegó al Festival Estéreo Picnic con Progreso y Retroceso (2016), su nuevo disco bajo el brazo, y demostraron que tienen nuevos aires y muchas ganas de seguir construyendo.


Quantic 

El inglés de sangre y colombiano de corazón nos mostró calidad musical e interpretativa en el escenario 2 del festival. Con una introducción jameada e improvisada con clarinete, trompeta, saxofón, batería, piano, bajo y guitarra, Quantic encendió la noche del día 3.

Sonidos jazz y funk mezclados con los más tradicionales géneros de nuestro país pusieron a mover las piernas y los brazos de los cerca de 3.000 espectadores. La invitada especial de la noche, Nidia Góngora quien desde Timbiquí, Colombia, le puso voz y sentimiento a los sonidos fusión del show. Ritmos del Pacífico y el Caribe llevados a perfección del jazz, el trip hop y el soul de Quantic. Nuestra cultura y nuestra música está a salvo con William Holland, su acordeón y su banda.


Sublime with Rome

La década de los 90 lleva consigo una nostalgia musical que es difícil de olvidar, por eso la presencia de canciones clásicas de Sublime hizo estremecer al público que vio el show en Estéreo Picnic. Enérgicos y conectados con el público, el sonido de esta banda cayó muy bien en medio de la transición sonora del escenario principal del Picnic que comenzó con Rap, pasó por los sonidos ancestrales di Totó La Momposina y llegó a esta propuesta con aires californianos y surfers. 
 
Y es que el ska invita a bailar, en el barro o bajo la lluvia, y el show de la banda estadounidense no fue la excepción. La formación de esta banda cuenta, en el bajo, con Eric Wilson quien perteneció a la formación original de Sublime en los 90 y que además del bajo tocó los teclados. A él se suma Rome Ramírez, un músico norteamericano con raíces latinas que tiene una voz que ensambla a la perfección con estos sonidos. 
El tracklist incluyó también canciones de Yours Truly (2011) y Sirens (2015) sus dos álbumes como Sublime with Rome, con las que han recorrido varios festivales del mundo. Este proyecto ha relevado generacionalmente el rock combinado con el ska y espíritu reggae. 


Wiz Khalifa

Antes de los shows electrónicos del festival hubo un manifiesto sonoro de lírica en inglés y rimas sobre la calle, el amor, la vida, el mundo y la sociedad. Wiz Khalifa a sus 29 años vino por primera vez a Colombia y nos demostró por qué actualmente es considerado uno de los mejores raperos a nivel mundial.

Un show potente acompañado de luces, cámaras de humo y un excelente DJ (Bonics); así vimos a Wiz Khalifa durante la hora y 20 minutos de concierto. Un rapero que nunca dejó de sonreír, de rapear, de saltar, de bailar, de entregarse realmente a los que con gran emoción lo vieron.

Canciones como Black and Yellow, See You Again, Young Wild & Free, y una versión especial de Walking on A Dream de Empire of The Sun, pusieron a temblar la tierra y a cantar a los
seguidores del rapero norteamericano que con entrega y amor por el micrófono, por el público y por el hip hop, nos regaló uno de los mejores conciertos del Festival. ¡Aplausos!
 
Foto de Andrés Alvarado tomada de Facebook: Festival Estéreo Picnic