Una cita con Cuarteto de Nos

Junto a Roberto Musso recorremos y recordamos las historias del disco “Raro”.
Martes, 2 Noviembre, 2021 - 05:59

Por: Álvaro González Villamarín

El 2006 fue un año raro para la música de Iberoamérica, nos puede mostrar un catálogo de historias con extrañas mutaciones o momentos que darían las coordenadas de un momento importante para la música en nuestro idioma en el siglo XXl.

Hoy vamos a viajar en el tiempo. En el caso de Argentina, para el 2006 comenzaba a aparecer una nueva generación de compositores y compositoras, quizá una de las agrupaciones más representativas es El mató a un policía motorizado; pues bien, en el caso de México, Zoé se encontraba navegando en el mar de la música alternativa; en España nos encontramos con algo aún más interesante, agrupaciones que cantaban en inglés comenzaron a ver en el idioma español una posibilidad para poder expresar sus sentimientos, ejemplos claros son Love of Lesbian y Vetusta Morla.

En el caso de Colombia, hay que hablar sobre la mezcla del folclor con el rap, la música electrónica y más, además, tanto el Pacífico como el Caribe comenzaban a tener diferentes voces en el mundo. Pero la sorpresa más grande llegó de un lugar quizá inesperado: Montevideo, Uruguay, para ese entonces llegaba el disco Raro (2006) de Cuarteto de Nos, que se convirtió en un éxito Latinoamericano.

Hoy en Una cita con el profe descubrimos las historias detrás del undécimo álbum de la agrupación uruguaya en la voz de Roberto Musso, líder y vocalista.

En abril de 2006 se publica un disco que al oírlo actualmente suena tan fresco, tan vital y nos permitió hacer una conexión mágica entre Uruguay y Colombia. Cómo pasa el tiempo, 15 años ya del Raro....

Sí, estás igualito profe no han pasado los años para vos y bueno por suerte para el personaje de la tapa de Raro tampoco, se mantiene parecido. Estamos acá en la casa en Montevideo en una linda tarde de verano disfrutando de los pocos días antes de que empiecen de vuelta las clases para los niños y también viviendo el aniversario del Raro, como no podía ser de otra manera en un año raro más raro todavía que el 2006, ¿verdad?.

¿Qué recuerdas de esos primeros momentos del Raro?, ¿Qué quieres recordar alrededor del pre Raro?

Fueron muchas cosas, la palabra raro se repite “n” veces cuando estás describiendo el proceso porque realmente lo que sucedió alrededor del disco fue muy raro para nosotros y para todos los que estaban en nuestro entorno.

Un poco de la historia del Cuarteto resumida es que veníamos trabajando desde los 90, éramos una banda muy masiva acá en Uruguay, no mucho más que en Argentina, nunca habíamos salido a tocar afuera del Río de la Plata en realidad, pero cuando empezamos a hacer este disco, por primera vez decidimos “empezar a patear el tablero de ajedrez”, hacer borrón y cuenta nueva, cambiar un montón de cuestiones artísticas y hasta logísticas.

Teníamos ganas de trabajar con un productor musical nuevo, empezar a trabajar nuestro relacionamiento con la prensa, con los medios, trabajar con alguna productora ejecutiva distinta y todo esto sumado dio ese cóctel que fue el disco Raro

En ese momento sentía que estaba compitiendo conmigo mismo, para mi la temática que tratábamos en las canciones ya se había agotado. En discos anteriores estaban muy bien, pero ya habían cumplido su ciclo, entonces, nos parecía que teníamos que abordar toda esa etapa que viene desde un punto de vista diferente, con los riesgos que siempre implica y que a veces tampoco hay un resultado trascendente, pero en este caso increíblemente pasó. Ese disco lo planeamos como una nueva etapa, una nueva fundación del Cuarteto

¿Cómo fue el trabajo con el productor Juan Campodónico? 

Nosotros éramos autoproducidos hasta el compás, nosotros cuatro éramos un producto de la generación extensa del rock de los 90. En aquel momento acá en Uruguay todo era muy amateur, no había mucho desarrollo como para subsistir solamente con la música, entonces la parte de producción de las canciones y la grabación la hacíamos sobre todo con Ricky, mi hermano, qué es el que sabe muchísimo de música, de sonido, y era el que se encargaba de las mezclas. 

En un momento nos pareció que la opción de tener un productor musical iba a estar bueno porque ya éramos un monstruo de cuatro cabezas que no tenía forma y Juan era en aquel momento un prometedor joven, venía con muchísima nata nueva, sangre fresca, una cabeza musical súper interesante y aparte fan del Cuarteto desde chico, desde que tenía 13 años, entonces ya corríamos con una gran ventaja en ese aspecto y bueno, Juan como que nos agarró y tuvimos muchísimas charlas antes de hacer el disco y tuvimos un objetivo común que era el sonido que queríamos tener y literalmente le dio a las canciones ese pulido que le faltaba a los discos anteriores y obviamente tuvo un resultado genial en cuanto a lo que es el sonido y el arreglo de las canciones.

Existe una fase de canciones un poco más experimentales de pronto con humor negro bastante fuerte y hasta un country, en cierto punto ¿Cómo describes esas aproximaciones, porque creo que el disco tiene ello? 

Totalmente y lo vemos nosotros ahora que una gran cantidad de canciones de Raro, siguen estando en el repertorio, no pueden faltar. De las 12 canciones que tocamos 7 u 8 temas del Raro los estamos tocando siempre, por eso es que tampoco amerita hacer un concierto especial de Raro porque lo estamos homenajeando todo el tiempo en los conciertos.

Yo me acuerdo de lo que vos decís del sonido, recuerdo haber estado en varias radios fuera de Uruguay, cuándo empezamos a mostrar el disco, en España, obviamente en Colombia, íbamos a programas FM y ponían una canción de cualquier artista mainstream y pasaban “Ya no sé qué hacer conmigo” o “Yendo a la casa de Damian” y no se desmejoraba el sonido entre los mainstream y lo nuestro, se mantenía al mismo nivel, estábamos muy bien en el sonido diseñado por Juan. 

Estamos ante un disco que tiene una lectura perfecta de época, juega con las sensaciones y las palabras ¿Cuál fue el reto para Roberto como compositor, ya que sé eres muy analítico al momento de crearlas, cómo sentiste en ese momento Raro?

Viste que ahí hay un poco de premonición en cuanto a, como lo dije al comienzo, quería zafarme un poco del estilo que veníamos haciendo, de ese Cuarteto de los 90 que jugaba mucho con el humor absurdo o con el humor negro, con la ironía al máximo sentido y que sentía que estaba un poco desgastado en mí mismo. 

Me gustó eso de abordar personajes desde una óptica distinta manteniendo esa esencia del Cuarteto porque “Yendo a la casa de Damián” es una canción con el absurdo en su máxima expresión, esa persona que no sabés quién es, qué va a la casa de alguien que no sabés quién es, que no se sabe por qué va y lo único que hace es contar qué pasa durante el trayecto, a mi me parece muy interesante esa historia y está contada con un lenguaje que era novedoso para mí en ese momento, el de las rimas, lo mismo que “Ya no sé qué hacer conmigo”, creí que era una canción que iba a ser entendida por gente mayor de 30 años y me equivoqué porque la primera vez que la tocaba recuerdo a un pibe de 15 o 16 años diciendo cantándome la canción en la cara diciendo: “mira yo hice más cosas que vos a los 16 años”. 

Entonces creo que ese abordaje de las letras desde otro ángulo fue un aire fresco para la banda misma y para mí como compositor y eso se notó en el disco, para mí marcó un nuevo camino de ahí hasta ahora, de lo que me gusta seguir escribiendo. 

Yo empecé a hacer canciones desde que tengo 16 años, entonces a escribir canciones cuando en aquel momento tenía 30 y pico o casi 40 años, era poder estar hablando de cosas que me interesaban más que lo que hablaba cuando había empezado.

Es un disco de personajes, construido con diferentes voces, ¿será esta la clave para la interesante disrupción que tiene el Raro?

Nosotros tenemos una base muy beatlera en el corazón, en el ADN de la banda está The Beatles, que era una banda de varias voces, eso lo tenemos claro, entonces siempre tuvimos esa influencia desde cuando éramos adolescentes y eso le dio una riqueza interesantísima al discurso de la banda.

Está buenísimo el disco porque cada canción parece de una banda diferente, por más de que esté el arreglo más o menos parecido, no hay dos canciones que se parezcan, creo que esa cuestión multifacética le da una riqueza super interesante. 

Este disco significó una apertura total, la banda importante de Uruguay y Argentina llega a España, a México, a Colombia y no es algo pequeño, ¿Que significó eso para la banda?, llegar a todo el continente y a un mercado tan difícil como puede ser el colombiano. 

Hablando un poco de lo absurdo y lo irónico, yo siempre digo que Raro es el disco que fue una llave de una puerta desconocida que se nos abrió, una puerta que ni siquiera sabíamos que existía para un mundo que nunca pensamos pisar, no por negarlo ni por afirmarlo, sino que simplemente nos planteó dudas. Pensamos que nuestra radio de acción iba a ser Uruguay, a lo sumo Argentina, que es lo que naturalmente cualquier artista uruguayo ve como posibilidad comercial de subsistir porque es un mercado 15 veces mayor que el uruguayo y está tan solo a media hora, se comparten muchos códigos lingüísticos y culturales, pero fue la apertura para Colombia, México y España, fue algo impensado. 

Por ejemplo recuerdo el primer show grande de un festival fuera del río de la plata fue en Rock al Parque, aparte esa vez cayó nieve (granizo) en Bogotá y casi se suspende el evento, era surrealista presentar Raro en ese momento, sorprender en un festival con 80.000 personas que ni nos conocían, pero había una gran cantidad de gente ahí cerca del escenario cantando las canciones.  

Para Medellín y Cali, o sea no solamente Bogotá, Raro es como una especie de disco de culto, incluso para el movimiento del rock en nuestro idioma en Colombia, es muy fuerte lo que pasa en estas dos ciudades con ustedes con su particular.

Siempre que vamos tocamos en las tres ciudades, la gente es realmente increíble en todo Colombia, por ejemplo, hemos tocado en Pasto y la gente tiene la misma algarabía. Yo siempre digo que tocamos más en Colombia que en Uruguay, es el país que más visitamos después de Uruguay y Argentina, el público colombiano siempre ha sido muy cercano a nosotros. 

Cuando éramos novios con mi esposa, antes de que el Cuarteto fuera internacional, nos encantaba ir a Colombia de vacaciones, fuimos muchas veces por el Caribe, otras por el Cabo de la Vela, nos encantaba a cada uno comprarnos un libro de García Márquez para leerlo en los lugares que mencionaba el escritor. Yo aprendí a visitar y a querer mucho a Colombia desde mucho antes de ir con el cuarteto.

Has hablado de que el disco ha estado implícito en la discografía posterior de la banda y en los conciertos, no obstante, ¿qué viene para los 15 años, hay un vinilo, existen cosas especiales alrededor del Raro?

No queríamos dejar pasar este momento, más en un año aún más raro que el 2006, con algo tan poco común durante el 2020 y 2021. Como los conciertos no se podían hacer, no queríamos solamente hacer un streaming del Raro, era repetir mucho lo que estábamos haciendo en el show, por eso nos pareció interesante sacar el vinilo, porque sabemos que a muchos fans del Cuarteto les gusta esa parte del objeto como valor agregado de la música y no se hizo en aquel momento así que esta era una buena oportunidad para hacerlo. 

Además, la tapa del Raro es muy buena, ese personaje hecho con la cara de todos nosotros, así como los videos de “Ya no se qué hacer conmigo” y “Yendo a la casa de Damián” también sumaron para que el disco fuera lo que es. 

¿En qué discos ves presencia fuerte del Raro? Nunca se repite el Cuarteto y esto lo tenemos que dejar claro, pero ¿ves alguna influencia en algunos de los discos posteriores?

Para mí fue un antes y un después sobre todo en la manera de componer, fue empezar a buscar otros ángulos, otras vueltas sintácticas y semánticas, desde dónde buscar este personaje y las situaciones. No creo que se haya repetido mucho, pero todavía sigo con ese camino posterior al Raro en la manera de componer, de hecho, nuestro repertorio está compuesto por canciones posteriores a este, tenemos muchos discos de antes y artísticamente nos gusta, pero este logró conectar con el público sobre todo de fuera de Uruguay, se engancha más con ese tipo de canciones.

Cuestionario Radiónica:

¿Disco favorito?

Led Zeppelin ll

¿Comida favorita?

Algún plato de la India, Muli que es pescado con leche de coco y especias.

¿Película favorita?

Brazil

¿Qué te produce miedo?

La incertidumbre

¿Qué es el amor?

Para mi es el dar y recibir con la gente querida, sobre todo con la familia

¿Una canción para cantar en voz alta, a grito herido?

"Come Together", The Beatles

¿Un libro recomendado?

Muchos, pero 1984 es increíble, es un libro que siempre me llamó la atención

¿Qué artista del Uruguay recomiendas?

Muchos, pero Leo Maslíah es un cantautor y músico que fue una de nuestras inspiraciones con mezcla de humor y sátira, música culta, y vale mucho la pena sus canciones.

¿Un lugar en el mundo?

Montevideo, no lo cambio por nada

¿Cómo se salva el mundo?

Yo creo que se salva siendo sinceros, y más en estas épocas y viviendo positivamente.