Abril: un mes para tener los ojos en el cielo

Abril: un mes para tener los ojos en el cielo

Varios fenómenos astronómicos se podrán disfrutar durante este mes, incluyendo una Superluna.
Miércoles, 31 Marzo, 2021 - 11:50

Por: Sara Arboleda

Durante el mes de abril tendremos la oportunidad de apreciar importantes eventos astronómicos que incluyen algunos planetas en la bóveda celeste, lluvias de estrellas, galaxias y, por supuesto, el evento astronómico más importante del primer cuatrimestre del año: La Superluna Rosa. 

La Galaxia del Sombrero

El mes comenzará con el avistamiento del objeto número 104 del catálogo Messier, mejor conocida como la Galaxia del Sombrero, debido a su apariencia. Según los datos del Instituto Nacional de Óptica y Astrofísica Electrónica de México (INAOE), esta es una galaxia espiral de brazos más o menos cerrados con un gran núcleo brillante, un bulbo prominente y una banda oscura de gas y polvo que atraviesa el disco de la galaxia. Se encuentra situada a una distancia de 29 millones de años luz en el límite entre las constelaciones de la Virgen y el Cuervo. 

La Galaxia del sombrero será visible durante toda la noche del jueves 1 de abril, alcanzando su altura máxima sobre el horizonte, un poco después de la medianoche, y podrá observarse a través de binoculares o telescopios pequeños hacia el este de la esfera celeste.

Figura 1: Imagen de las coordenadas de la Galaxia del sombrero, tomada del sitio web del el Instituto Nacional de Óptica y Astrofísica Electrónica de México (INAOE).

Conjunción de la Luna, Saturno y Júpiter.

Durante los atardeceres del martes 6 y el miércoles 7 de abril, la Luna, Saturno y Júpiter estarán en la misma longitud celeste, lo cual permitirá que los amantes de estos fenómenos astronómicos puedan observar desde las 04:30 pm, cuando comience el atardecer, a la Luna y Saturno que estarán aproximadamente a 38 grados de altura sobre el horizonte sureste del firmamento.  El 7 de abril, la Luna y Júpiter estarán en conjunción desde las 4:30 hasta las 7:06 pm y se estima que ambos acontecimientos podrán tener condiciones favorables de visibilidad.

Lluvia de estrellas Líridas

La lluvia de meteoros Líridas o estrellas fugaces, como son comúnmente llamadas, tendrá lugar entre el 16 y el 25 de abril, siendo su punto de mayor actividad los días 22 y 23 de abril. Durante este periodo podremos observar alrededor de 18 meteoros por hora, con una velocidad promedio de de 49 km/s. 

Este fenómeno se da debido a las partículas de polvo sobrantes del cometa Tatcher, que al ingresar en la atmósfera de la tierra se desintegran por el calor y generan este espectáculo visual.

Según informa INAOE, desde las 11:30 de la noche y hasta el amanecer se podrá disfrutar de este espectáculo, además los expertos aseguran que, para observarlo, hay que fijar la mirada hacia la parte noreste de la esfera celeste, en dirección de la constelación de Hércules. 

Figura 2: Imagen del cuadrante de la constelación de Hércules, en donde se podrá observar la lluvia de estrellas Líridas, tomada del sitio web del Instituto Nacional de Óptica y Astrofísica Electrónica de México (INAOE).

Superluna Rosa 

La Superluna Rosa, también conocida como Luna de Pascua, es el evento astronómico más esperado del primer cuatrimestre del año, se le llama así debido a que el satélite, en su fase de llena, estará en el punto geocéntrico más cercano a la Tierra conocido como Perigeo. La luna se encontrará específicamente a 357 mil 591 km y debido a su cercanía con la tierra lucirá hasta un 14% más grande y aparentemente más brillante.

Muchas personas creen que, por el nombre asignado a este fenómeno celeste, la luna se verá de color rosado, pero no es así, pues se le conoce como Superluna Rosa por la coincidencia con el nacimiento de flores de este color en diferentes campos de Estados unidos y Canadá, debido la llegada de la primavera. 

El espectáculo astronómico podrá ser visto durante la noche del martes 27 de abril, para observar este y todos los acontecimientos astronómicos del mes de abril, los expertos recomiendan tener en cuenta las condiciones climáticas, buscar espacios alejados de la contaminación lumínica, preferiblemente espacios geográficamente altos, y además tener muchas ganas y paciencia para esperar los momentos de mayor actividad.