Imagen: www.victoriaholguin.com. Cortesía de prensa.

Las dificultades que enfrentan las mujeres venezolanas para acceder a la IVE

Este 7 y 9 de septiembre, La Mesa por la Vida y la Salud de las Mujeres presentará el informe “Uno pasa por muchas cosas”: barreras de acceso a la IVE en mujeres refugiadas y migrantes venezolanas en Colombia.
Miércoles, 7 Septiembre, 2022 - 03:11

Por: Radiónica

La Mesa por la Vida y la Salud de las Mujeres, con el apoyo de la Fundación Oriéntame y Médicos del Mundo – Francia, desarrolló la investigación “Uno pasa por muchas cosas”: barreras de acceso a la IVE en mujeres refugiadas y migrantes venezolanas en Colombia”. Aquí se identifican las barreras de acceso a la Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) y a otros servicios de salud sexual y reproductiva como la anticoncepción, la atención del parto y la atención de las violencias basadas en género que experimentaron las mujeres venezolanas refugiadas y migrantes en Colombia entre los años 2018 y 2021, especialmente en Bogotá, San José de Cúcuta, Soacha e Ipiales

Dentro de los principales resultados se encuentra que las mujeres migrantes y refugiadas venezolanas se enfrentan a un marco restrictivo y discriminatorio para el acceso a la prestación del servicio de la IVE, producto de su condición migratoria, lo cual se agrava en aquellas con un estatus migratorio irregular y, entre ellas, en las caminantes.

La autora del informe es Juliana Martínez Londoño, PhD en Ciencias Humanas y Sociales y Exsecretaria de Mujeres en Medellín, quien afirma que “las barreras que enfrentan las mujeres para acceder a la IVE se basan en prejuicios y estigmas sobre el aborto. En el caso de las mujeres migrantes y refugiadas venezolanas se añade la xenofobia y discriminación de la que son objeto por su condición. Esto también implica tener en cuenta los patrones culturales que influencian las prácticas en torno a la salud, la sexualidad y la reproducción”. 

Como parte de la investigación se realizaron entrevistas, grupos focales, análisis de datos y casos, entre otros métodos de investigación. Con esto, se identificaron tres grandes categorías en las que se presentan las barreras de acceso: el desconocimiento del marco legal, que lleva también al desconocimiento de la IVE como una urgencia; las interpretaciones restrictivas de este, con la solicitud de documentos que den cuenta del estatus migratorio y las fallas en la prestación de los servicios.  

“Ahora, dentro de las barreras de acceso particulares que enfrentan las mujeres migrantes se encuentran: el desconocimiento de la legalidad del aborto en Colombia, la falta de intimidad en sus espacios habitacionales -lo que dificulta obtener información oportuna- la falta de redes para la prestación del servicio, las fallas en cuanto a las denuncias por violencia sexual, la negación del servicio por no tener un estatus migratorio regular, entre otras”, añade un comunicado sobre el mismo.
 
En cuanto a las barreras de acceso a otros servicios de salud sexual y reproductiva, la investigación documenta que, para quienes no cuentan con afiliación a salud, el acceso a métodos anticonceptivos no está disponible, ni siquiera a través de urgencias, así que las mujeres migrantes irregulares solo pueden acceder a estos en la atención post parto o post aborto sin lograr controlar su fecundidad. 

En cuanto a la atención del embarazo y el parto, las mujeres refugiadas y migrantes venezolanas con estatus irregular solo logran ser atendidas al momento del trabajo de parto, sin haber tenido acceso, en muchas ocasiones, a controles prenatales. También se identificaron hechos constitutivos de violencia obstétrica, ya que las mujeres informan haber recibido maltrato tanto con comentarios que cuestionaron sus decisiones reproductivas, como al dejar de ser consultadas sobre los procedimientos médicos llevados a cabo en sus cuerpos.

En este enlace pueden encontrar el informe.