Foto tomada del Facebook oficial de Joey Jordison

“¡Nunca dejaré de ser un puto bicho raro y un puto metalero!”: Joey Jordison

​Recordamos parte de la carrera del legendario baterista y lo que fueron sus últimos años lidiando con su enfermedad.
Jueves, 29 Julio, 2021 - 11:59

Por: Juan Pablo Conto

Joey Jordison recibió su primera batería a los ocho años. El nacido en Iowa, EEUU, en 1975, vivía con sus padres y dos hermanas en una zona rural a las afueras de Waukee, una pequeña ciudad en el condado de Dallas. Aunque había empezado con la guitarra, con la que intentaba imitar lo que oía en una radio frente a la cual su padre lo sentaba durante horas, fueron los tambores y platillos los que marcarían su destino. 

Armó bandas desde la primaria, dejó la escuela, trabajó en una tienda de música y en un taller. Sus padres se divorciaron, se fue con su madre que se volvió a casar y que montó una funeraria. Jordison ayudó con el negocio y fue ahí, en 1991, cuando fundó Modifidious. Era una de las únicas bandas de metal del área, que se disolvió en 1995 por diferencias de sus integrantes en el camino musical a seguir. 

En esos años la cosa estuvo movida. Jordison se unió como guitarrista a una banda local llamada The Rejects con la cual, aunque solo tocó en un par de conciertos en ese momento, tendría una historia de idas y venidas. También se sumó brevemente a una agrupación junto Paul Gray y el vocalista Don Decker, llamada Anal Blast. Y hacía 1996 se unió a The Have Nots, una banda de punk con la que grabaría una producción titulada Forgetting Yesterday and Beating You with Kindness (1996).

Sin embargo había algo que se venía cocinando y que definiría la vida del joven baterista. En 1992, el percusionista Shawn Crahan, el vocalista Anders Colsefni, el bajista Paul Gray y los guitarristas Donnie Steele y Quan "Meld" Nong se juntaron a hacer música. Ese impulso joven por el ruido derivó en The Pale Ones, a la que Jordison se integró. Con el tiempo también se sumó Josh "Gnar" Brainard.

Se presentaron en un primer concierto bajo el nombre de Meld en 1995, pero poco tiempo después el propio Jordison propuso cambiarlo por el de Slipknot, que correspondía a título de una pieza que ya tocaban y que estaría incluída en el primer demo Mate.Feed.Kill.Repeat (1996). La alineación se fue abultando hasta completar esos nueve míticos integrantes que dieron forma a una de las bandas más reconocidas del metal. Slipknot fue la casa de Jordison desde su formación hasta su salida en diciembre de 2013. 

Desde ese momento la carrera del músico solo fue en aumento y sumando nombres hasta el día de su muerte: la banda de horror punk pesado Murderdolls, las agrupaciones de heavy metal Scar the Martyr y Vimic  o el supergrupo de metal extremo Sinsaenum son otros proyectos que ahondaron la huella y el legado de Jordison. Además actuó con grupos como Rob Zombie, Metallica, Korn, Ministry, Otep o Satyricon.

Sin embargo siempre se mantuvo firme con Slipknot, convirtiéndose en uno de sus miembros más queridos por los fans. Por eso resultó una absoluta sorpresa cuando en 2013 se anunció su salida.

Las especulaciones no demoraron, fueron discutidas en medios y redes sociales, y decantaron en que el baterista se había descarrilado y no estaba cumpliendo con sus deberes dentro de la banda. Slipknot fue además muy sutil en la comunicación y simplemente dijo que se traba de diferentes direcciones creativas y que ya no podían trabajar juntos de manera efectiva.

Fuera de alguna publicación en Facebook en 2014, en la que Jordison dejaba claro que, en lo que a él correspondía, no había acuerdo mutuo y había sido despedido de Slipknot por razones desconocidas, fue poca la certeza frente a este episodio. Y por un tiempo el baterista pareció esfumarse.

En 2016, Joey Jordison apareció en la portada de la revista Metal Hammer. En esta se abrió por completo, habló de lo sucedido en 2013, de sus sentimientos y su salud. Nuevamente la sorpresa fue completa. 

Contó que estaba acostado en la cama con su esposa cuando recibió un correo electrónico con el que lo notificaron de su salida de Slipknot. “¿Ninguna reunión de banda? Ninguna [...] Todo lo que recibí fue un maldito correo electrónico que decía que estaba fuera de la banda por la que me rompí el culo toda mi vida, ¿sabes?”, diría en esa entrevista al tiempo que reclamó que, sobre todo, se trataba de una banda de amigos que habían pasado juntos por muchas. 

En la conversación también relató cómo al final de una serie de conciertos entre 2011 y 2012, en Canadá, se empezó a sentir mal, enfermo, como nunca se había sentido en la vida, aunque con esfuerzo pudo seguir tocando. 

Luego de exámenes y visitas al médico descubrió que tenía mielitis transversa aguda, una condición neurológica que golpea la médula espinal y que le afectó las piernas por completo: “Es como si te cortaran las piernas, básicamente. Toqué esos dos últimos shows y me asusté muchísimo. No sabía qué era. Todo el mundo pensó que estaba jodido por otras cosas, pero no fue así. Ni siquiera estaba bebiendo. Todo estaba encarrilado y jodidamente perfecto”, decía para luego sentenciar:  "El dolor era algo que nunca antes había experimentado en mi vida, y no se lo desearía a mi peor enemigo".

Tras necesitar aparatos ortopédicos para que no se le doblaran las piernas, Joey finalmente fue dado de alta del hospital en octubre de 2012 y entró en un régimen de terapia física largo y agotador. Para 2013 comenzó a trabajar en el álbum debut de Scar The Martyr y se vino un nuevo bloque de conciertos de Slipknot en Japón y Europa, mientras aún se recuperaba de lo peor de su enfermedad que dejaba un marcado desgaste físico y emocional. Pudo cumplir, pero se regaba la voz de que tenía un problema con las drogas y/o con el trago. El 12 de diciembre de ese año se anunció su salida de Slipknot. 

En la citada entrevista Joey dice que hasta sus amigos de banda se confundieron por lo que ocurría con su salud y que él entendía la preocupación que llevó a ponerlo a un lado, pues tampoco tenía claro lo que sucedía. Decía además que no guardaba ningún rencor hacía ellos, que eran sus amigos, que había seguido adelante y se encontraba muy feliz, como hace mucho no se sentía.  “La vida te lleva a viajes extraños y solo tienes que aguantar, montar la ola y ser tan fuerte como puedas”, afirmaba mientras se encogía de hombros. 

Vinieron trabajos geniales como Echoes Of The Tortured (2016), el álbum debut de Sinsaenu, o el sencillo "Simple Skeletons” de Vimic, que básicamente era Scar The Martyr con un nuevo vocalista: el ex percusionista de Korn, Kalen Chase. Se trataba de un renacimiento de un nuevo viaje y de seguir creando. “A cierta edad, muchas personas se vuelven vegetarianas o encuentran la religión, ¡pero nunca dejaré de ser un puto bicho raro y un puto metalero!”, decía el baterista, que seguía encontrando en la música ruidosa y furiosa la mejor medicina de todas.

Habiendo sido un ejemplo de la fuerza, la perseverancia, la pasión y el potencial del espíritu humano, Joey Jordison falleció el 26 de julio de 2021 a la edad de 46 años. Al momento de esta publicación las causas no habían sido reveladas, aunque los cercanos aclararon que  su partida fue en paz.