Un recorrido por 'El Ayuno de las Causas Imposibles' de Nanook el Último Esquimal
Muchos han perdido la costumbre de escuchar discos de principio a fin, haciendo un viaje por cada uno de los temas que componen estos trabajos. Por eso aquí revisamos la tercera producción entre full albums y Ep’s de una banda que amplia y afianza el concepto de identidad en el rock folk colombiano: Nanook el Último Esquimal.
El disco, El Ayuno de las Causa Imposibles (2018) es una ágil colección de 11 cortes que durante treinta y tres minutos trasladan y capturan la atención del escucha, con la propuesta más compacta y el sonido mejor grabado que han presentado a la fecha.
La experiencia post punk, rock clásico y alternativa da inicio con un buen tema instrumental llamado Sua Marmota, pieza que para abrir un disco genera respeto, seriedad y en general representa una visión diferente del orden común actual. Es una buena iniciativa para el oyente, ¡es sentir algo!.
Continúa el proceso con el sencillo de corte radial Quema las cortinas, canción con reflexiones modernas y cotidianas, que avivan el fuego para lo que sigue; un potente corte folk rock muy Bob Dylan con La Ventana.
Desde este momento es claro que el grupo es de letras, no sólo de rock n’ roll visceral. De hecho, es elegante y dentro de todo lo underground y post punk, alcanza a ser maduro y serio. Es un deleite en la forma como analiza y describe clases sociales y su cotidianidad a veces resignada. Lo mismo sucede pero de manera un poco más eléctrica, ecléctica y ácida con el tema Vou Vazar!.
De un aire clásico pasamos a una sorpresa oscura y alternativa que dice When Reaper Comes, un tema en español con la voz en forma de suave murmullo, lleno de aires de carretera y que nos trasladan al siguiente tema. Aparece entonces una estructura más radial y con toques británicos, que simplemente dice No se acepta no aceptar. Es una buena forma de tomar impulso y llevarnos al Instrumental 00.28.51.23 (madrogado) como interludio.
El estilo del grupo mezclado con un poco más de sonido británico y revelando una nueva bestia en su ser, es claro en temas como Stone McGill, el manifiesto alternativo denso de 3910 o paseo psicodélico con algo de Sonic Youth alrededor de Poor Bastards.
Finalmente encontramos un cierre amable y de aire brasilero con Ni Dioses ni Astronautas, producto claro de sus vivencias y acercamientos musicales en el país vecino.
El disco fue producido por el baterista Andrés Silva y la banda misma, grabado en su propio estudio y editado por su propio sello independiente, Discos La Modelo. Una iniciativa que se extiende como respaldo para otras agrupaciones independientes y de carácter alternativo.
El Ayuno de las Causas Imposibles (2018) es un gran aporte frente a lo que puede hacer el rock colombiano como producto de la dedicación, constancia y la ausencia de temor... Es un disco de los que no había en el rock nacional a la fecha.
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