The Strokes en Estéreo Picnic / Foto de David Micolta tomada de Facebook

Controversial e histórico: The Strokes en Bogotá

El pasado 24 de marzo un sueño se le cumplió a los miles de espectadores que presenciaron el primer show de la banda comandada por Julian Casablancas en Colombia.
Sábado, 25 Marzo, 2017 - 04:12

Por: Juan Jaramillo

Luego de años de rumores, expectativas y falsas esperanzas The Strokes aterrizó en Colombia demostrando que no son esa banda imposible de ver que muchos creían. Cerca de las 12:30am los comandados por Julian Casablancas comenzaron uno de los shows más esperados y comentados en la historia del país. 
 
A pesar de que hace algunos años la banda no presenta ningún larga duración, el público colombiano cantó, bailó y reconoció cada uno de los clásicos de la banda como si fuera nuevo y, de cierta manera, lo era para un país que los esperaba con ansias. 
 
La influencia de esta agrupación neoyorkina es más que clara en la escena del rock mundial y, en particular, el colombiano. Agrupaciones como Árbol de Ojos, Oh'LaVille, Los Makenzy, Go Out Strangers, entre otras, han reconocido en The Strokes una pieza clave para el crecimiento de su propuesta y el renacer de un género que se vió estancado durante finales de los años noventa y comienzos del nuevo milenio.


Foto de Camilo Baez tomada de Facebook: Festival Estéreo Picnic

Un repertorio ecléctico, que podría ser arriesgado para la gran mayoría de bandas, fue uno de los diferenciales que marcó su presentación. Con la inclusión de grandes hits a la mitad del espectáculo The Strokes demostró que no depende de una canción determinada para marcar un precedente y sorprender a sus fanáticos.
 
A diferencia de la vistosidad audiovisual y luminotécnica que caracterizó a la gran mayoría de actos presentados en el festival, este show estuvo marcado por la simplicidad y ese estilo característico de la banda que desde sus inicios sólo pretendía contarle al mundo su cotidianidad y lo difícil que puede ser desarrollar un futuro en el mundo actual.
 
Seguramente muchos de los presentes percibieron apatía y dejadez en su puesta en escena, y efectivamente el show fue bastante frio asemejándose a un ensayo o cualquier toque sencillo, sin embargo, es precisamente ésta una de las características que hizo que la banda impactara desde su nacimiento; quien haya esperado un show vistoso y enérgico seguramente le costó digerir el concierto en Bogotá, pero bueno sería intentar comprender que la banda nunca ha mostrado ningún interés en hacer de sus conciertos espectáculos, sino mantenerse fiel a su estilo: sobrio, desganado, apático quizá, o simplemente sencillo, sin adornos de ninguna clase. 
 
The Strokes generó amores y odios entre los asistentes y seguramente dará mucho qué hablar durante los meses venideros, pero lo que nadie puede negar es que fue un concierto que marcó historia y que, sin duda, abrirá las puertas para que muchos más artistas catalogados en algún momento como 'visitas imposibles' agenden nuestro país en sus giras. 
 
¿Estuvieron ustedes ahí? ¿Qué sensación les dejó The Strokes en Bogotá? Cuéntennos...